En las inmediaciones de la ciudad de Kraljevo se localiza, al lado de la Iglesia de la Santa Dormición, el monasterio de Žiča, perteneciente a la Iglesia Ortodoxa Serbia, que edificó el primer rey de Serbia a principios del siglo XIII y se convirtió en el sitio donde tradicionalmente serían coronados los reyes de aquella nación. Caracterizado por el color rojo de sus recios muros y por la sobria elocuencia de los estilos arquitectónicos que fueron dándole forma a través de las épocas, el monasterio alberga una notable reunión de frescos que dan testimonio de la fe que ha resguardado, y es un símbolo central del pueblo serbio. A unos pasos del monasterio, e históricamente asociada a él, se localiza la biblioteca de Kraljevo, de donde hace algunos años salió al mundo la imaginación de un autor absolutamente inesperado y, como muy pocos en estos tiempos, provisto de las sustancias que propician los libros más memorables: Goran Petrović es el bibliotecario en ese recinto añoso de la ciudad donde nació...
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